10 Sep Ferrari y sus inesperados pilotos: Política y traición
Quiero veinte mil libras por temporada, el cincuenta por cierto de los premios y el cincuenta por ciento de los bonus, además de un coche de calle para mi uso personal. También quiero seguir compitiendo en la Fórmula 2 con el equipo de Ken Tyrrell.
Jackie Stewart tenía muy claro lo que quería cuando se sentó en el despacho de Enzo Ferrari en Fiorano para discutir los detalles de lo que tenía que ser su contrato para la temporada de 1968. El piloto escocés era un diamante en bruto desaprovechado en BRM y después de un muy difícil 1967, se encontraba en una situación delicada en la que sentía que necesitaba cambiar de aires.